Evitando ser vistos por los numerosos Guardias Crinargenta, finalmente se sitúan en la entrada que conduce a la zona restringida de la Guardia Crinargenta. Los guardias de aquí están fuertemente armados. En comparación con los que patrullaban la ciudad, estos parecen más hostiles...
Sin embargo, notas que su hostilidad disminuye cuando ven a Serval. Con la ayuda de la hija de la familia Landau, no encuentran más obstáculos durante el trayecto.
Como no están familiarizados con este lugar, necesitan ir a un terreno más alto para observar los alrededores.